La implementación de modelos didácticos efectivos en colegios rurales del Perú es crucial para mejorar la calidad educativa y el desarrollo integral de los estudiantes. Este tema es particularmente relevante dada mi experiencia en el colegio PACA 00035 en Gorgor, Lima, donde he observado de primera mano los desafíos y oportunidades únicas que presentan estos entornos educativos. La problemática actual radica en la prevalencia de modelos tradicionales centrados en el docente, que limitan la participación activa y el desarrollo de habilidades críticas en los estudiantes. Montero (2001) señala que en el 65% de las sesiones observadas, la actividad central estaba en manos del docente, evidenciando la necesidad de un cambio hacia modelos más participativos y contextualizados.
Frente a este desafío, proponemos un modelo didáctico ecléctico que integra elementos de los enfoques humanista y socio-crítico. Este modelo aprovecha las oportunidades únicas de los entornos rurales, como la cercanía entre estudiantes y docentes, el contacto con la naturaleza y la riqueza cultural local. Los argumentos clave para este modelo ecléctico son: fomentar la autonomía y participación activa de los estudiantes, crucial en entornos con recursos limitados; integrar la evaluación continua como herramienta de mejora, no solo de calificación; implementar el Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) para conectar el aprendizaje con las realidades locales (Iranzo et al., 2022); promover la colaboración entre estudiantes, docentes y comunidad, fortaleciendo los vínculos sociales; y adaptar las prácticas pedagógicas al contexto rural, aprovechando los recursos naturales y culturales disponibles.
La implementación efectiva de este modelo requiere una formación docente humanista y crítica reflexiva que capacite a los maestros en metodologías activas y participativas, integración de recursos y contextos comunitarios en el proceso educativo, desarrollo de proyectos relevantes para la comunidad rural, y evaluación continua y retroalimentación efectiva. Y lo más importante, un docente sensible a su realidad, comprometido con las infancias y con su país. Esto permitirá a los docentes aprovechar al máximo las oportunidades únicas que ofrecen los entornos rurales, facilitando un aprendizaje más significativo y contextualizado para los estudiantes.
En conclusión, este modelo didáctico ecléctico tiene el potencial de transformar significativamente la calidad educativa en las zonas rurales del Perú. Al empoderar a los estudiantes, fortalecer los vínculos comunitarios y adaptar las prácticas pedagógicas a las realidades locales, se puede lograr un aprendizaje más significativo y contextualizado. La formación docente continua y la evaluación constante del modelo serán fundamentales para su éxito y adaptación a largo plazo, asegurando que la educación en las zonas rurales del Perú no solo mejore en términos de calidad, sino que también contribuya al desarrollo integral de los estudiantes y sus comunidades.
Artículo elaborado por:
Bryan Renzo Estrada Portilla
Estudiante de Educación