El primero de diciembre del año 2022, tuvimos la oportunidad de participar virtualmente en el foro “Los nuevos escenarios de la escuela” que estuvo a cargo del colegio Isabel Flores de Oliva – CIFO. En este espacio hubo expositores que presentaron temas sobre a qué problemas se enfrenta el sector educativo y cómo no responde a las demandas del mundo actual, y cómo el discurso en el currículo sobre lo que representa el espacio escolar y el rol docente como agente de cambio, no es llevado a cabo en la práctica dentro de las aulas.
Desde el inicio del seminario, recordamos que vivimos en un mundo que experimenta constantes cambios y la escuela actual no responde a ellos. Estos problemas como el calentamiento global, la baja de tasa de empleos, brechas en la digitalización de las personas y retroceso democrático, afectan fuertemente nuestra realidad y son temas que no se abordan en la escuela. Sobre todo, en el área de América Latina sigue primando la educación tradicional, reforzando contenidos que no necesariamente van a ser útiles para los ciudadanos más jóvenes una vez hayan culminado la educación básica, porque son muy técnicos, mas no adaptativos.
Con “técnico” nos referimos a que los aprendizajes que propone la escuela, no permiten que los alumnos puedan utilizar estos conocimientos para poder insertarse en el mundo universitario, laboral y a que sean responsables socialmente.
Entonces, en el foro nos enfrentamos a la pregunta ¿Cómo generar que esta nueva educación sea adaptativa?
Se proponen diferentes ideas, por ejemplo, viviendo en un país democrático, deberíamos introducir a los alumnos en el concepto de “democracia” desde la vida escolar, por ende, se puede iniciar un “laboratorio de democracia”, hacer que los estudiantes sean quienes tomen las decisiones importantes (en medida de lo posible) como las normas de convivencia, mediante juntas y votaciones.
Asimismo, respondiendo a la crisis ambiental a la que nos enfrentamos hoy en día, deberíamos dar un espacio para enseñar a “ser y pensar sosteniblemente”, dar respuesta a un desarrollo sostenible desde los primeros años en la escuela y enseñarles a tener un enfoque eco-amigable y se debería contar con espacios destinados a la experimentación, diversidad e innovación.
En la segunda parte del foro, se habló sobre lo que representa el espacio escolar, el rol docente como agente de cambio, qué nos ofrece el currículo y cómo este es o no llevado a la práctica dentro de las aulas.
Nos comentaron que el espacio escolar debe ser un lugar en el que se traten las problemáticas que afectan a los alumnos y alumnas como la salud mental, pero también se debe hablar y realizar acciones sobre problemáticas que afectan al mundo en general. La más importante que parece afectar es la recuperación de la democracia, ya que actualmente existen diferentes conflictos como guerras, enfrentamientos entre Estado y ciudadanía, así como falta de representación en las autoridades.
Partiendo por verla como un espacio de gestión de problemas colectivos, en donde se resignen vínculos entre pares guardando el respeto mutuo, poniendo en valor las diversas opiniones promoviendo así la tolerancia. Asimismo, se enfatiza en que, para lograr este objetivo, se debe llevar a cabo elecciones internas en el colegio pues la enseñanza de la política no debería quedarse solo en lo técnico (poderes del estado y partidos), sino que debe vincularse con la participación estudiantil.
De esta forma, es importante mencionar el rol que va a cumplir el docente en este aprendizaje, pues es el agente de cambio que ayudará a los alumnos a estar preparados para enfrentarse a la vida, es decir, a que se adapten progresivamente a los cambios. Sin embargo, cabe mencionar que, lamentablemente, hay algunos docentes que no tienen esta visión compartida de lo que las generaciones actuales necesitan aprender.
Es así que entramos a un currículo, ya que, de acuerdo a este, se busca que los alumnos aprendan a pensar y a ser críticos con las situaciones e información que consumen, que la procesen. Sin embargo, a pesar que esta idea sea lo ideal, solo se queda como un discurso vacío y escrito sobre un papel que no repercute realmente en el estudiantado ya que no es posible que todos logren esta capacidad si el que enseña no es un modelo adecuado.
Podemos decir, en síntesis, que la educación necesita adaptarse a los cambios en el mundo. Se necesita de un enfoque ambiental y social dentro de las aulas que permita que los alumnos tengan una base de conocimientos útiles para su vida fuera de la etapa de educación básica. Es importante considerar los desafíos a los que los alumnos se van a enfrentar para poder plantear un enfoque nuevo, alejado de la educación tradicional como la podemos ver reflejada en muchas escuelas.
Finalmente, sobre el espacio escolar, los docentes y el currículo debemos promover mayor participación del alumnado generando contextos aplicados a la realidad dentro del espacio escolar y también tratar de mejorar la calidad de docentes con un pensamiento crítico desde su formación y seguir capacitando a los que ya se encuentran en el aula.
Elaborado por:
Gabriela Aquije Battistini – 5to ciclo – Educación Inicial
Dana Calizaya Alvarez – 5to ciclo – Educación Inicial
Referencias:
Guerrero, L., Urrutia, A. (01 de diciembre, 2022). “Los nuevos escenarios de la escuela”. Seminario Colegio Isabel Flores de Oliva.